Sin ganas de hacer nada

Hoy me levanté sin ganas de nada. Inactiva completamente. Algo apática. De hecho, son las seis y media de la tarde y sigo igual. Sin embargo, aprecio como me recreo observando este estado en que me encuentro y constato que no puedo cambiarlo. Ya ni siquiera lo pretendo. Y ello me permite estar en paz. Inactiva, quizás apática, pero en paz.

Cualquier cosa que contenga el momento presente, acéptelo como si usted lo hubiera escogido. Trabaje siempre con él, no contra él. Conviértalo en su amigo, en su aliado, no en su enemigo. Esto transformará su vida milagrosamente. Eckhart Tolle.

Paradójicamente, verme en esta inactividad tan sorprendente que por mi experiencia sé que tal y como vino se irá, es lo que hoy me está entreteniendo. Hasta entonces, hasta que esta desidia decida abandonarme, me doy el permiso de estar y mantenerme  así, sin ganas de nada. Definitivamente, la indiferencia hoy se apoderó de mí.

Meditar te cambia la vida

A mi me la cambió.

Para mejor, claro. Para mucho mejor.

Apúntate para abrir esa puerta.


sin ganas de nada

Sin ganas de nada: Observa las cosas sin juicio

Por suerte, consigo estar atenta a lo que me está sucediendo. Alcanzo a escuchar y a sentir mi cuerpo. Puedo observar la lentitud con la que hoy se mueve. Me pesa. Hoy me pesa tanto el cuerpo que por momentos lo creo de plomo. Me cuesta avanzar. La ligereza hoy brilla por su ausencia.

Hoy parece que da igual lo que suceda. Las horas del día pasan como sin pasar. Ningún quehacer inútil con que rellenar las horas, los minutos y los segundos a los que tan acostumbrada estoy.

(Renacer de las cenizas (de la noche))

Lo poco que hago, lo hago observando las pocas ganas que tengo de hacerlo. Sonrío al caer en la cuenta del regalo que hoy se me ha brindado. Aceptar mis pocas ganas de nada. Sonrío de nuevo. Empiezo a sentir integrada la meditación en mi vida diaria. Hoy no he podido tener mejor práctica.

Aceptar significa que te permites a ti mismo sentir cualquier cosa que sientes en el momento. Es parte de la condición de ser del ahora. Eckhart Tolle.

Gracias.

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Mavi Mariscal

Buscadora y practicante de la meditación Samatha & Vipassana. Enamorada del silencio y la quietud. Del ruido y la vorágine. De lo simple, bello y poético. De lo complejo, feo y prosaico. De lo profundo y superficial. De lo espiritual y terrenal. Del todo y de la nada. La práctica de la meditación me ha reconciliado con lo que "ES", aquí y ahora.